7/12/2006

un silencio repugnante, por atilio borón

eeuu e israel masacran países con gusto, placer e ilegalidad. la onu se caga en las invasiones pero condena a corea del norte por tirar al mar seis bombines de mierda. la legalidad internacional no existe, solo existe la perversión del imperio multinacional conservador.


A veces el silencio es atronador. En estos días el mutismo de los sedicentes defensores de la democracia liberal, el mundo libre y la economía de mercado resuena con estrépito. El régimen genocida de Israel, siniestro heredero de su verdugo nazi, está perpetrando un crimen incalificable contra el pueblo palestino. Cuando Bush caracterizó al gobierno de Hamas como “terrorista” y la Unión Europea avaló esa infamia Tel Aviv se sintió respaldado y abrió las puertas del infierno. El bombardeo a mansalva de poblaciones civiles indefensas, los atentados contra autoridades democráticamente electas de Palestina y la destrucción de todo lo que encontraban a su paso fue la voz de orden del gobierno israelita. Las oficinas de los principales ministerios fueron destruidas; ministros, parlamentarios y altos funcionarios de la Autoridad Palestina encarcelados; el suministro de electricidad para la mitad del millón y medio de habitantes que se apiñan en Gaza fue inutilizado por la aviación israelí, paralizando escuelas, hospitales, talleres y comercios, dejando a los hogares sin ese vital recurso. En pocos días más ya no habrá agua potable, porque las estaciones de bombeo dejarán de funcionar. Caminos intransitables, campos abandonados, la frágil infraestructura de Gaza está siendo metódicamente arrasada ante la indiferencia del mundo. Noche tras noche la aviación israelí sobrevuela ese pequeño territorio arrojando bombas de estruendo, y de las otras. La orden del valiente y honorable Primer Ministro israelí, Ehud Olmert, fue terminante: “que nadie duerma en Gaza.” El pretexto de esta barbarie: la captura por parte de la resistencia palestina del cabo del ejército israelí Gilad Shalit -captura, no secuestro, dado que Shalit era miembro de un ejército invasor y fue capturado por sus enemigos en combate. Ante ello, Tel Aviv se negó a negociar con sus captores un intercambio de prisioneros políticos –hay unos 900 niños y adolescentes palestinos presos en Israel, y más de 5000 adultos, todos calificados como terroristas. Las cárceles de Israel, como las de Guantánamo, no recluyen a seres humanos.

nota completa:
http://www.rebelion.org/noticia.php?id=34336

2 comentarios:

Luz dijo...

Así es tocomocho
las cárceles no recluyen a seres humanos, tampoco acá en Reputalandia. Al pasar por el portón de entrada, pierden más que la libertad, evidentemente.

El tema israelí me tiene más que muda... Leo lo que aparece en todas partes, leo todos los comentarios, pero me resulta TAN irracional, que no lo puedo manejar

Rubén Fernández Lisso dijo...

yo tampoco luzbe, por eso puse esta nota que tiene las palabras que a mí me faltan.