1/14/2008

fábulas citadinas: tan castos como nos puedan obligar / the sindicate

la mujer (ma qué mujer, la hembra infernal) se le acercó por atrás y lo rozó con el hombro. se le encendió el alerta y dejó hacer. después le rozó la mano con la cadera. el alerta ya era alerta rojo.

cuando la mano de la mina (ma qué mina, la mismísima diosa del sexo) le rozó lentamente, sensualmente, todo el largo del antebrazo, él se dio vuelta y se encontró con unos pechos (ma qué pechos, las tetas más increíblemente sexuales que haya visto) y una sonrisa (ma qué sonrisa, la expresión más absolutamente provocativa y hermosa que nunca hubiera visto) y no se pudo resistir. levantó las manos rozando suave la cintura, llegó a la parte externa de esos pechos (ma qué pechos, la fruta más deliciosa que nunca hubiese soñado ni siquiera acariciar) y acarició la forma completa de esos manjares. y todo se alteró. el mundo tembló. sonaron alarmas y campanas.

en pocos segundos llegaron los agentes de seguridad y lo detuvieron, y aprovecharon para darle una buena golpiza. detrás del vidrio espejado, el dueño de la diosa hecha mujer pagaba satisfecho por el nuevo sistema de alarma de castidad. el nuevo cinturón de castidad es un chip.


....


hacía tanto tiempo que no oía hablar de sindicatos. en estos días volví a oír. y me hicieron acordar de esta canción.

EL SINDICATO

¡Compañeros
antes de llegar a la huelga,
se impone un periodo
de Reflexión!
¡No debemos dejarnos llevar
por fanatismos sin sentido!
Lo primero es negociar,
lo segundo quedarnos dormidos!
Tenemos una plataforma
con peticiones de altura,
las iremos olvidando
según nuestro calendario!
¡No se asuste!
No hay ningún motivo!
Que no muerden,
¡son como mis hijos!
A echar! A echar!
es la consigna!
que no nos van
a dar pan!
Nuestro sindicato es mayoritario
¡Mantiene la paz social!
¡Danos unas zanahorias,
que justifiquen nuestro papel!!
Compañeros! Una gran victoria!
Nuestras quejas han sido escuchadas!
Volveremos el año que viene!,
y tampoco pasará nada.
¡No apretemos demasiado!
¡Peligra la economía!
Me estoy volviendo amarillo.
Mañana será otro día!!


sí, claro, es de la polla records.